8 de marzo de 2022. Para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, Francisca Gallardo Montero (periodista del CAM Santiago) conversó con la Dra. María Agnes Salah Abusleme, Vicepresidenta del Consejo Directivo del Centro de Arbitraje y Mediación (CAM) de la Cámara de Comercio Santiago (CCS).
María Agnes Salah Abusleme es abogada y Doctora en Derecho por la Universidad de Chile, además de Máster en Derecho Tributario por la misma casa de estudios y Máster en Derecho por la Universidad de Harvard. Actualmente es profesora asociada del Departamento de Derecho Privado de la Universidad de Chile y recientemente fue Integrante de la Comisión de Reforma del Reglamento Procesal de Arbitraje Nacional del CAM Santiago. Con anterioridad ha sido Herbert Smith Freehills Visitor en la Facultad de Derecho de la Universidad de Cambridge, Ex Directora de Relaciones Internacionales de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile y Mentora del «Programa de Mentoring AJ CAM Santiago: Mujeres Líderes en Arbitraje» y del «Programa Aprendiendo a Liderar».
La conmemoración del día de la mujer es muy importante por cuanto permite visibilizar un problema real, que es la discriminación estructural que perjudica a las mujeres. Al mismo tiempo, permite generar mayor conciencia de las dificultades y desafíos a los que nos vemos enfrentadas las mujeres, fomentando la percepción de situaciones de discriminación que muchas veces son normalizadas.
Que siempre confíen en sus capacidades, que no teman a las críticas que se realizan a la igualdad de género y que sean solidarias.
El mundo jurídico progresivamente ha tomado una mayor conciencia de la situación de las mujeres, pero de manera muy lenta e imperfecta. Ciertamente faltan cambios estructurales y permanentes.
Es fundamental contar con figuras femeninas en roles de autoridad, tanto porque sirven de inspiración para muchas mujeres como porque su desempeño en cargos con poder de decisión permite que impulsen políticas de género apropiadas.
Las admiro a todas, cada una de ellas ciertamente posee más de una capacidad digna de admiración.
Creo que hay numerosas experiencias que han producido efectos positivos en esta materia. El fomento de la responsabilidad de los hombres en labores de cuidado, principalmente de menores y adultos mayores, constituye un imperativo para lograr un cambio relevante. La incorporación de cuotas, como medida transitoria, ciertamente ha provocado cambios interesantes, tanto a nivel de resultados como de empoderamiento de las mujeres.
Estimo que ha existido un cuestionamiento conceptual muy pronunciado en relación con la discriminación de las mujeres y de las políticas de género que, a mi juicio, es mucho más fuerte en el mundo del derecho que en otras áreas. Esto creo que ha frenado fuertemente aquellos cambios necesarios para que la desigualdad contra las mujeres no perdure en el tiempo.