El pasado 1° de diciembre tuvo lugar el Foro Legal: «Derecho Privado y Pandemia», organizado por el Instituto Chileno de Administración Racional de Empresas (ICARE), en torno al análisis y reflexión sobre la suficiencia de las respuestas que nuestro Derecho entrega ante escenarios como los que estamos viviendo.
La instancia se dividió en dos paneles, el primero correspondiente a la «Teoría del Derecho de Emergencia» que estuvo compuesto por cuatro expositores y el segundo denominado «La Práctica del Derecho de Emergencia ante el Estallido Social y la Pandemia», el cual fue moderado por la abogada Mónica van der Schraft Greve (integrante de la lista arbitral del CAM Santiago) y contó con la participación de la Directora Ejecutiva del Centro de Arbitraje y Mediación (CAM) de la Cámara de Comercio de Santiago (CCS), Macarena Letelier Velasco.
En esta oportunidad, la Directora Ejecutiva del CAM Santiago se refirió a la experiencia del CAM en las mediaciones civil y comerciales, enfatizando la profunda labor del Centro para efectos de difundir este método adecuado de resolución pacífica de conflictos y permitir que las causas sean resueltas por esa vía, considerando especialmente los tiempos de crisis en que nos encontramos.
En un primer lugar, destacó que, en relación a la observación del comportamiento de las personas frente a los conflictos, existe una gran responsabilidad del CAM Santiago de dar a conocer qué es lo que ocurre en la práctica, especialmente en tiempos de crisis donde hay diversos factores que han aportado a establecer condiciones mínimas para que las partes se sienten a conversar y lleguen a acuerdos, lo que hoy se traduce en desafíos concretos para la comunidad jurídica.
En este sentido, se refirió a los elementos involucrados cuando existe un mayor o menor acceso a la justicia, tales como la democracia, la paz social, la dignidad y, también, la reactivación económica. Así, afirmó que los caminos que deberíamos transitar para llegar a la justicia dicen relación con que debemos ser capaces de adaptarnos a través de las diversas herramientas tecnológicas, de diálogo y de escucha activa disponibles, sumado a la existencia de una mirada integrada del conflicto.
En la práctica, afirmó que el CAM se ha adaptado y en relación con los resultados concretos, destacó el rol de la tecnología en el mundo jurídico, que se ha traducido en la agilización de trámites, simplificación del sistema de notificaciones, transparencia del sistema y facilitación para los intervinientes. En este sentido comentó las ventajas y el reconocimiento de E-CAM Santiago en la región, así como las más de 1.000 videoconferencias de arbitraje que se han realizado en los últimos meses, lo que, unido al sistema de interconexión con el Poder Judicial, permitió al CAM, por un lado, obtener herramientas bases para no paralizar la tramitación de los casos y, por otro lado, que existiera un acuerdo en cuanto a cómo avanzar, de la mano lo dispuesto por la Ley N° 21.226 en el caso de los arbitrajes
Sin duda, la tecnología está pasando a ser un factor fundamental para entregar una respuesta a las personas de manera previa a que se judicialicen los conflictos.
En su exposición, la Directora Ejecutiva del CAM Santiago también se refirió a las estadísticas del Centro, donde recalcó que, este año el crecimiento del ingreso de causas ha sido exponencial, lo que va de la mano de la crisis debido a la pandemia de COVID-19. En un principio, comentó que si bien existía un temor razonable en torno a las audiencias virtuales de pruebas, es posible observar hoy que el 15% de las audiencias han sido pruebas testimoniales, lo que se entiende a partir de la existencia de un común acuerdo de las partes, la buena fe, el principio de acceso a la justicia y un equilibrio entre la celeridad y el debido proceso.
En cuanto al arbitraje y al cierre de causas, hoy hay herramientas para que las partes solucionen imprevistos, donde es relevante la existencia de un espacio de conversación en que las mismas partes pueden construir acuerdos y donde es posible observar que, en más del 90% de los casos, el cumplimiento del acuerdo es total porque éstas fueron parte de la solución.
También ha sido posible observar que en algunos casos que originalmente contemplaban un arbitraje ad hoc o la competencia de la justicia ordinaria, las partes han acordado otorgar competencia al CAM Santiago y han solicitado arbitrajes institucionales, lo que se explica por la no se suspensión debido a la tramitación electrónica y a la interconexión existente con las Cortes de Apelaciones.
En relación a la mediación, el crecimiento ha sido más grande tanto en el sistema tradicional de mediación institucional como en el programa pro-bono de 1.000 Mediaciones. En este último, las materias que se repiten con más frecuencia corresponden a arrendamientos, construcción y compraventa de inmuebles. En esta línea el CAM Santiago ha celebrado distintos convenios institucionales para difundir este programa, subrayando la importancia de la colaboración entre organismos intermedios de la sociedad para poder llegar a las personas y crear vehículos serios que puedan difundir la existencia de estos programas especiales.
Para la Directora Ejecutiva del CAM Santiago, constituyen desafíos importantes, el seguir innovando en material judicial, perder el medio a la utilización de la tecnología y desarrollar aún más las herramientas de diálogo con relación a la labor social de los abogados, lo que sin duda nos llevará a la certeza jurídica. Así mismo, enfatizó en el desarrollo de mecanismos adecuados de resolución pacífica de conflictos en un marco de generación de políticas públicas, en cuanto existe la necesidad de una Ley General de Mediación en materia civil y comercial en Chile, pensando en la dignidad de las personas y en la paz social para nuestro país, toda vez que una ampliación del acceso a la justicia, lo que hace, es justamente entregar dignidad.
Por Camila Vergara Alcayaga (Pasante del CAM Santiago)
Puedes revisar el foro completo aquí